CZEŚĆ! (2)

Buenos días niños y niñas :) ¿Os acordáis de las tres palabras mágicas? Hoy vamos a ver cómo suenan en polaco y qué dificultades ocultan. Va a ser muy interesante.

Przepraszam. Perdón.

La que parece ser la palabra más difícil de pronunciar. Inmediatamente después de Szczebrzeszyn. En polaco, los primeros ejemplos de su uso provienen del siglo XIV, pero no se convirtió en la forma de pedir perdón comúnmente usada hasta el siglo XVII. Anteriormente utilizábamos dos palabras: “przepraszam” y “wybacz” que tenían dos funciones distintas. “Przepraszam” solo se refería a hechos pasados, mientras que “wybacz” también hacía referencia a hechos futuros. Por ejemplo, en el siglo XVI, los verdugos dirigían la palabra “wybacz” a sus víctimas justo antes de la ejecución. Hoy en día esta distinción ya no existe.
Sin embargo, hay que diferenciar las palabras “przepraszam” y “przykro mi“. “Przepraszam” es una confesión. Se usa cuando alguien se siente culpable por algo. “Przykro mi“, en cambio, no significa necesariamente que quién lo dice tenga la culpa. Comparad estas dos frases:
– “Przepraszam za spóźnienie. Zaspałem.” (Siento llegar tarde. Me quedé dormido.)
– “Przykro mi, że źle się dzisiaj czujesz”. (Siento que hoy te encuentres mal.)

Dziękuję. Gracias.

Al igual que “przepraszam” (y “proszę”), desde el punto de vista gramatical, “dziękuję” es un verbo en primera persona del singular. Yo “przepraszam” (pido perdón) y yo “dziękuję” (doy las gracias). Se puede por lo tanto conjugar como cualquier otro verbo: tú “dziękujesz”, él „dziękuje”, etc.
¡Ojo! Hay dos formas de este verbo: yo “dziękuję” y él/ella/ello “dziękuje” que sí se escriben de manera diferente pero suenan igual. Esto pasa porque en todas las palabras que terminan con la /ę/ nasal, al pronunciarlas, la nasalidad se pierde por completo*.
Además del “dziękuję”, en el discurso coloquial, escucharemos también su versión abreviada “dzięki” o, basada en la palabra inglesa “thanks”, “dzięks”.

Proszę. Por favor.

Es probablemente la más complicada de las tres “palabras mágicas” ya que no significa simplemente una solicitud. Se puede usar en distintos contextos.
Seguida por genitivo puede servir para llamar la atención de alguien:
– “Proszę pana! Wypadł panu portfel!” (¡Señor! ¡Se le cayó el monedero!)
– „Proszę pani, czy możemy otworzyć okno?” (¡Señora!, ¿podemos abrir la ventana?).
Puede introducir una orden más formal:
– „Proszę stąd wyjść.” (Por favor, váyase de aquí! en lugar de “Wyjdź stąd!” – ¡Vete de aquí!)
Puede ser la confirmación de una solicitud:
– “Podaj mi sól.” – “Proszę.” – “Dziękuję.” (– Pásame la sal. – Aquí la tienes. – Gracias.)
o un énfasis de que estamos ofreciendo algo a alguien:
– “Proszę, to dla ciebie.” (Toma, es para ti.)
Se puede convertir en una solicitud para aclarar o repetir algo:
– “Proszę? Przepraszam, nie dosłyszałem.” (¿Cómo? Lo siento, no te he oído.)
o en una invitación:
– “Proszę, niech pan wejdzie.” (Adelante, pase.)
También lo podemos usar para expresar asombro:
– “O proszę, a jednak przyszedłeś!” (¡Ah vaya, al final has venido!)
o cuando acaba de suceder algo que hemos previsto:
– “No proszę, mówiłem, że się spóźni” (Mira que dije que llegaría tarde).

“No proszę”, ya os dije que sería interesante :)

 

*Pronunciarlas como nasales es un error llamado en lingüística ultracorrección.